viernes, julio 18, 2008

las malas noticias terrenales son buenas noticias de la vida eterna

Si bien me prometí no volver a escribir un tema personal en éste blog. Los eventos ocurridos hoy necesito escribirlos en algún lugar, pues claramente marcarán para siempre mi estadía en la universidad. Todo marchaba como un día normal de clases, yo trabajaba en mis cosas, cuando un amigo se me acerca y me dice con un tono algo exaltado una noticia que me dejó en shock. La verdad no sé que pasó por mi mente, se me puso en blanco, y quien sabe cual fue la cara que puse, pero inmediatamente cambiaron mis pensamientos, y mi trabajo pasó a la última prioridad. Al ser comprobar la trágica noticia, tuve que empezar a transmitirla a mis amigos. Es terrible ser el mensajero de las malas nuevas, pues notas como se transforma la cara de las personas en una que rara vez tienes la oportunidad de ver, esa transformación de cara es la peor experiencia que puedes tener., pero alguien tiene que hacerlo. Me trataron de frío, o que no sirvo para dar esa clase de noticias, pero mis acciones fueron así en el transcurso del día, y sólo logré expresar mi pena cuando quedé solo.

Este post no trata de mí, sino de mi amigo Raúl Ortega, Raulito para los amigos, Darth debian en la internet. No puedo evitar dedicarle unas palabras a quien amaba la computación más que nadie. Él era un fanático de todo lo relacionado con las artes de los bits. Fanático de Opensolaris, Linux, aparatos raros, redes, java, sun, etc. Nunca le negó ayuda a alguien, incentivó a sus amigos a participar de la causa que él creía era la mejor, participaba de una causas solidarias, y siempre estaba dispuesto a cooperar, incluso en las tareas voluntarias de operaciones, lugar donde trabajabamos juntos como ayudantes.

Su sonrisa era constante, incluso cuando relataba malos momentos como la falla fatal de su laptop el día de la flisol. Quien hubiera imaginado que dicha muerte era un cruel presagio de lo que sucedería sólo un par de meses después. De haberlo sabido, no nos hubiéramos reído de ti. Sino que compartiríamos tu pena, y te habríamos invitado a una cerveza a celebrar por la amistad, a
disfrutar la vida al máximo, a reírse de las historias y locuras compartidas mientras formamos parte de nuestro grupo de software libre, y ¿porque no?, a burlarnos del "bando contrario", una de las clásicas conversaciones que teníamos cuando sacábamos a la luz nuestro lado friki.

Si bien no conversáramos en exceso, era un buen amigo, y nos unía nuestro hobby favorito. Precisamente la última conversación con él la tuve éste fin de semana, cuando además de saludarme, me preguntó acerca de un emulador x86 que pudiera limitar la velocidad de ejecución. Me pareció rara la pregunta y le pregunté porqué quería hacer eso. Me explicó que pretendía recuperar unos computadores antiguos para instalarle debian, con el fin de darselos a los niños pobres o algo así, queda demostrado que siempre pensaba en los demás.

Para terminar, necesito escribir éstas palabras, y de la siguiente forma, como probablemente te hubiera gustado:
LinuxDiinf fue más que un grupo de compañeros de universidad en unión por la difusión del software libre, ha sido la interfaz para que implementemos cada uno la función amistad. A pesar de que tu corazón no late, siempre estarás referenciado en nuestra memoria. Además, estoy seguro que ahora resides en un espacio reservado sólo a la gente buena, y no me cabe duda que estás allí, instalando opensolaris a los sistemas de registro del cielo.

Este post va en tu honor raulito!
Tus amigos no te olvidarán.